1/5/09

"Dietario Voluble" (Enrique Vila-Matas, 2008)


Oda a tus regalos

¿Qué es un “Dietario Voluble”? ¿Un plan alimenticio para turistas? ¿La agenda de una pompa de jabón? ¿Una receta médica? ¿Un nuevo periódico? Son los dilemas que se barajan antes de tropezar con la espalda de Enrique Vila-Matas, o, más bien, con su mano impúdica… Nada conquista tanta confianza como un gesto tamaño íntimo y doméstico. Nada seduce nuestro entusiasmo como las páginas de este libro.
Para que no queden dudas, lo diremos: Dietario Voluble es la celebración sinestésica de la lectura: las palabras saben a piel de naranja; los autores huelen a palmeras; y la vida suena a mosquitos tocando –Be My Baby en- el saxofón… La literatura a Vila-Matas se le mete por los sentidos, y se le escapa por la escritura. Es algo orgánico, radicalmente ilimitado.
Puede que exista un “personaje” Vila-Matas, sólo que no tarda en ser fagocitado por La vida de los otros; que se engalana de todas las condiciones atléticas para lanzarse al exilio, con encarnizada puntualidad, en el instante mismo en que creemos descubrirlo… Lo cierto es que, en este diario, nunca nos encontraremos frente a frente con el autor: ni en la portada, ni en la solapa, ni en su interior… y acaso tampoco importe demasiado. En todo caso, es mejor perderlo que encontrarlo – aquí y no vagando en sus novelas-. En todo caso, las urgencias bien podrían ser otras. Para reconocerlas, basta preguntarnos qué hacemos mientras leemos Dietario Voluble. A saber, subrayamos nombres propios, citas, títulos, ideas, buscando aplacar nuestra ignorancia; o nos regocijamos (no sin pedantería) ante casuales coincidencias en nuestras bibliotecas; y en algún momento, cuando logramos disimular el autoerotismo, somos testigos del milagro polifónico, de la renovación -armónica- de la Torre de Babel: todos hablan (Kafka, Borges, Cortázar, Magri, Casas Ros, Walser, Sebald, etc.); desde la novela hasta el ensayo, pasando por la poesía y la autobiografía, los géneros entran en trance y se solidarizan… Agradecemos la generosidad de su anfitrión y le rogamos nunca dude en regalarnos esta clase de libros.


Siempre será una fiesta encontrarse ciertos sitios acerca de Dietario Voluble, espero que hagan metástasis los siguientes:
• “La persistencia de una tarea” (Sergio González Rodriguez, Suplemento “El Ángel”)
• “El estilo de la Felicidad” (Rodrigo Fresán, Página 12)
• “Antes le daba la espalda al lector, ahora busco ser leído” (Entrevista de Alejandro Belloti, Diario Perfil)
• “Si no sé qué hacer, leo Kafka” (Entrevista de Peio H. Riaño, Público.es)

Y de yapa: “Razones para envidiar a Vila-Matas” (Alan Pauls, Revista “Otra Parte”)

2 comentarios:

  1. ¡Hola, Julia! Aunque sólo he leído "Bartleby y compañia" de Vila-Matas, me gustó tu reseña/recomendación. Gracias por los enlaces también. ¡Saludos!

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  2. Me alegro que te haya gustado... si lo lees comentame que te parece. Aun no leí "Bartleby y compañia" aunque creo que tantas recomendaciones me convencieron, jaja. Cariños

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